Vargas LLosa dice que vivimos en una época de devoción al entretenimiento. Si bien es cierto que la diversion es importante, en la actualidad ésta se vuelve casi indispensable. Nos gusta la vida fácil o light, incluso los libros son mas ligeros porque a los lectores nos les gusta hacer esfuerzo por entender.Como diría Susy Dias : "no leo libros porque me duele la cabeza". Y ejemplo de esos libros hay montones, empezando por la noviecita de jaime baily, y etc.
Hace tiempo cuando trabaja en una tienda de ropa, conversaba con mis compañeras de ventas. Una de ellas me decía: Me aburro estando acá, espero la hora en que termine el trabajo". Típico comentario de mucha gente. Pero me contaba su disyuntiva:"No entiendo, vengo acá y me aburro, pero llega los fines de semana, cuando no hago nada y me aburro de no hacer nada".
Entonces nos aburrimos de todo. Siento que hemos demonizado el aburrimiento o el no saber que hacer, o no estar ocupados, simplemente, nos desesperamos.
Entonces buscamos como divertirnos, u ocuparnos, para no pensar mucho porque si llega el fin de semana y te echas un momento, comienzas a pensar mucho.
Huimos del trabajo, y llegamos a casa, para luego huir de la casa, que inquietos somos. Parece que no soportamos ningun lugar.
Tal vez, despues de todo no es malo aburrirse un poco, en el trabajo o en casa, tal vez sin querer queriendo, aprendemos a divertirnos si nos quedamos.
Hace tiempo cuando trabaja en una tienda de ropa, conversaba con mis compañeras de ventas. Una de ellas me decía: Me aburro estando acá, espero la hora en que termine el trabajo". Típico comentario de mucha gente. Pero me contaba su disyuntiva:"No entiendo, vengo acá y me aburro, pero llega los fines de semana, cuando no hago nada y me aburro de no hacer nada".
Entonces nos aburrimos de todo. Siento que hemos demonizado el aburrimiento o el no saber que hacer, o no estar ocupados, simplemente, nos desesperamos.
Entonces buscamos como divertirnos, u ocuparnos, para no pensar mucho porque si llega el fin de semana y te echas un momento, comienzas a pensar mucho.
Huimos del trabajo, y llegamos a casa, para luego huir de la casa, que inquietos somos. Parece que no soportamos ningun lugar.
Tal vez, despues de todo no es malo aburrirse un poco, en el trabajo o en casa, tal vez sin querer queriendo, aprendemos a divertirnos si nos quedamos.